Sunday, April 1, 2012

Trastorno obsesivo-compulsivo

"Comenzó a crecer su impaciencia de manera alarmante. Recogió sin embargo las naranjas, una por una, para distraerse, pero no tuvo tiempo de llegar al automóvil; agachada, recogiendo la última naranja, se comió la rodilla hasta el hueso."
-Silvina Ocampo, "Malva".

Cuando Malva se impacienta se arranca (sin querer) un cacho, de un mordisco. Cuando esto pasa Malva no brota ni una gota de sangre, porque la sangre, como dicen las madres, es muy escandalosa, y el dolor de Malva es un dolor mudo, un golpe seco. Impacientarse es no "darle tiempo al tiempo", no existir en la propia existencia sino en una anticipación vacía, vaciarse de manera proactiva: comerse a uno mismo, vivirse desde la muerte. Los tics y las compulsiones son maneras de saltarse la vida, de no jugar, de no poder seguir esperando la llegada de la eterna pausa.

No comments:

Post a Comment